Los sindicatos agrarios españoles anunciaron su adhesión al movimiento de protesta que está teniendo lugar en Europa, especialmente en Francia, donde los agricultores mantuvieron bloqueadas varias autopistas de acceso a París, antes de que el gobierno hiciera nuevos anuncios. Aunque cada país enfrenta desafíos específicos, todos coinciden en señalar las normativas de producción en la Unión Europea y las importaciones de países fuera del bloque como causas potenciales de una disminución de ingresos y pérdida de competitividad, según informó la AFP. Los sindicatos españoles ASAJA, COAG y UPA consideran la importación de “productos agrarios de terceros países a precios bajos que presionan a la baja a los de la UE” como un caso de “competencia desleal”. En relación con la protesta de los agricultores franceses, el presidente Emmanuel Macron, durante su visita a Suecia, criticó a aquellos que culpan a la Unión Europea por todos los problemas, calificándolo de demasiado fácil. Además, advirtió que muchos agricultores franceses no tendrían ingresos sin la Política Agrícola Común (PAC) europea. A pesar de esto, reiteró su oposición al acuerdo comercial entre la UE y el Mercosur, argumentando que las normas de producción agrícola de estas naciones sudamericanas no son homogéneas con las europeas. Macron, quien tiene programada una reunión en Bruselas con la titular de la Comisión Europea, Úrsula Von der Leyen, abogó por una regulación más estricta de las importaciones de pollo y cereales de Ucrania, un país en guerra con Rusia desde 2022.
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