El proyecto del oficialismo para modificar el impuesto a las ganancias y beneficiar a más de 1,2 millones de personas que quedarán excluidas del gravamen, sumó el acompañamiento de Juntos por el Cambio, aunque con algunas condiciones. El bloque opositor quiere apurar su tratamiento en las sesiones extraordinarias, que finalizan el 28 de febrero, e incluir a los autónomos y monotributistas en el debate. “Acompañamos el proyecto de impuestos a las ganancias y pedimos que se excluya a los jubilados del régimen general, que no tienen por qué pagar ese impuesto, como lo venimos pidiendo. La coalición opositora mantuvo una reunión virtual horas después de conocido el proyecto presentado por Sergio Massa, en la que resolvió evaluar detenidamente la propuesta, pero acompañar el debate en comisiones y en el recinto. Por tratarse de un tema que ya había sido planteado por esa fuerza política, busca además que su tratamiento sea en sesiones extraordinarias, pero para eso debe hacer la convocatoria Alberto Fernández. Los encargados del interbloque de Juntos por el Cambio de evaluar la iniciativa son los diputados Luis Pastori y Luciano Laspina, que analizan en detalle cada uno de los artículos propuestos. Al respecto, Pastori dijo que sería una “omisión seria no incluir a los trabajadores autónomos, que quedarían en desventaja en el pago de ganancias de 1 a 3”. “En una primera leída, salvo la falta de inclusión de los trabajadores autónomos, el proyecto fija un mínimo no imponible y parece ir en la dirección correcta”, señaló. “La idea es que vamos a acompañar el proyecto, pero la crítica va por el lado de que se han olvidado de los trabajadores autónomos, que están discriminados, porque entre $40.000 y $50.000 como piso ya pagan ganancias, un comerciante y un profesional”, dijo. En el oficialismo aún no está definido si el proyecto será incorporado al temario de sesiones extraordinarias a través de un decreto presidencial, pero confían en que a más tardar en marzo podría contar la media sanción de Diputados, debido a las dificultades para tratar la iniciativa en febrero.
Sucede que, a los escasos días hábiles que le restan al segundo mes del año, se suma que aún debe dictarse el DNU presidencial e iniciarse los debates en comisiones parlamentarias. Además el 1° de marzo es la apertura de sesiones legislativas ordinarias. Sin embargo, al sumar el acompañamiento de la oposición todos los trámites podrían agilizarse y cumplir así la expectativa de pasar al Senado en luego de la Asamblea Legislativa. La CGT fue una de las primeras centrales de trabajadores en salir rápidamente a respaldar el proyecto. A través de un comunicado de prensa destacó que “beneficia a trabajadores de todo el país, que podrán evitar el impacto de tan injusto tributo” y consideró que también “ayuda a potenciar el mercado interno porque los principales beneficiarios, trabajadores y jubilados destinan la mayor parte de sus ingresos al consumo”. En un comunicado firmado por los secretarios adjuntos de Camioneros, Pablo Moyano, y del SMATA, Mario Manrique, confiaron en que “este injusto impuesto será finalmente eliminado”, por lo que acompaña “las acciones de gobierno que tiendan hacia este objetivo”. “Desde nuestro espacio insistimos históricamente en nuestro legítimo reclamo: lograr una reforma tributaria en beneficio de los trabajadores cuyo salario no constituye ganancia en modo alguno”, agregaron.