Aerolíneas Argentinas anunció la resolución del conflicto con sus gremios tras firmar un acuerdo orientado a aumentar la productividad de la compañía y alinear beneficios laborales con los estándares de la industria aerocomercial. La negociación incluyó a los gremios APLA (pilotos), AAA (tripulantes) y APA (rampa y check-in), quienes aceptaron una oferta salarial del 16% junto a modificaciones en los convenios colectivos. Por su parte, APTA (mecánicos) y UPSA (personal superior), que ya habían avalado la propuesta salarial, acordaron nuevas condiciones de movilidad y flexibilidad en tareas. Entre los cambios, la empresa destacó que los pilotos y tripulantes renunciaron a beneficios como traslados en remis, pasajes vacacionales confirmados en clase ejecutiva y el inicio de la jornada laboral durante el traslado al aeropuerto, estableciendo que ahora comenzará en las terminales. Además, el personal mecánico y de rampa aceptó flexibilizar su movilidad entre hangares y líneas de trabajo según las necesidades operativas. Por otro lado, los empleados de check-in levantaron las restricciones al uso de terminales de autoservicio y sistemas automáticos para despacho de equipaje, mientras que la tripulación autorizó la implementación de un servicio de venta a bordo. Aerolíneas Argentinas informó que estas medidas permitirán aumentar entre un 3% y 5% las horas mensuales de vuelo y eliminar restricciones vigentes durante más de una década, que impactaban negativamente en la eficiencia y los resultados económicos de la empresa. También se introdujeron incentivos salariales vinculados a las horas efectivas de operación de pilotos y tripulantes, buscando incrementar la productividad general. La compañía destacó que estas reformas son parte de una estrategia para reducir costos y optimizar la gestión operativa, lo que permitió reducir el déficit en un 75% respecto a 2023, cuando las pérdidas alcanzaron los 390 millones de dólares. Además, aseguraron que estas modificaciones garantizarán la estabilidad de la programación durante la temporada de verano. El vocero presidencial, Manuel Adorni, celebró el acuerdo y destacó el fin de lo que denominó “privilegios de la casta aeronáutica”, refiriéndose a prácticas laborales que, según expresó, no se ajustaban a los estándares de la industria moderna. La administración de la línea de bandera reafirmó su compromiso con avanzar hacia un modelo más eficiente y sostenible para el futuro.
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