La ciudad de Odesa fue escenario de un ataque con drones por parte del Ejército ruso. En este incidente, uno de los drones impactó a tan solo 150 metros de distancia del presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, y del primer ministro de Grecia, Kyriakos Mitsotakis. Durante el momento del ataque, Zelenski estaba mostrando el puerto de Odesa a Mitsotakis, cuando un proyectil enviado desde Rusia explotó a pocos metros de ellos. Afortunadamente, ambos líderes políticos resultaron ilesos, pero la explosión causó la trágica muerte de cinco civiles y dejó varios heridos, según la confirmación de la televisión privada SKAI. Tras el incidente, Mitsokatis compartió su experiencia, describiendo el sonido de sirenas y explosiones cercanas como impresionante. Expresó su comprensión de que esta guerra tiene un impacto global, afirmando que Ucrania está enfrentándose a una “fuerza bárbara”. Zelenski, por su parte, responsabilizó a Rusia y señaló su indiferencia ante la presencia de militares, civiles e internacionales en suelo ucraniano. Calificó la acción rusa como un acto de un “ejército terrorista” sin control. La respuesta oficial de Rusia desde el Ministerio de Defensa explicó que el ataque se dirigió a un hangar en la zona del puerto industrial de Odesa, donde, según afirmaron, Ucrania preparaba barcos de combate no tripulados. El Kremlin argumentó que los misiles de alta precisión alcanzaron su objetivo al destruir el mencionado objeto. Es importante destacar que Odesa ya había sido objeto de un ataque ruso el sábado anterior, cuando lanzaron un dron kamikaze sobre un edificio residencial, resultando en la trágica pérdida de 12 civiles, incluidos cinco niños. La situación sigue tensa en la región, exacerbando las tensiones entre Ucrania y Rusia.
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