Corea del Norte llevó a cabo una nueva serie de disparos de artillería con munición real en las costas occidentales, intensificando la tensión en la región. Este evento marca el tercer día consecutivo de ejercicios militares en proximidad a la frontera con el Sur, según informó la agencia de noticias surcoreana Yonhap. Las fuerzas norcoreanas dispararon ráfagas de obuses en la misma área, cercana a las islas de Yeonpyeong y Baengnyeong, al sur de la frontera marítima de facto entre ambos países. La agencia informó que “el ejército norcoreano está llevando a cabo ejercicios al norte de la isla surcoreana de Yeonpyeong, en la primera línea de fuego”. Según Pyongyang, se trata de un “entrenamiento marítimo con fuego real” con 88 proyectiles de artillería. En relación con estos ejercicios, Corea del Norte afirmó que no representaban ninguna amenaza intencionada para Corea del Sur y formaban parte del “sistema normal de entrenamiento de nuestro ejército”, según un comunicado de un oficial divulgado por la Agencia Central de Noticias de Corea (KCNA). A pesar de la intensidad de los disparos, ningún proyectil cayó en el lado surcoreano de la Línea Limítrofe del Norte (LLN), que marca la frontera marítima de facto en el mar Amarillo, y no se han reportado víctimas, según indicó la agencia Yonhap. Ante la situación, las autoridades locales de las islas surcoreanas del mar Amarillo recomendaron a la población que permanezca en sus hogares, advirtiendo sobre los disparos provenientes de Corea del Norte. Aunque las tropas de la isla de Yeonpyeong respondieron, se instó a los residentes a tener precaución con las actividades al aire libre.
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