Tras el cese de la tregua, el Ministerio de Salud dirigido por Hamas en Gaza informó que 178 palestinos perdieron la vida y alrededor de 600 resultaron heridos debido a los ataques aéreos israelíes en el enclave. Los ataques se reanudaron minutos después de que concluyera la tregua de una semana, con el ejército israelí acusando a Hamas de violar el alto el fuego. Hamas, a su vez, mantiene a 137 rehenes sin liberar y continúa lanzando misiles hacia Tel Aviv. El Ejército de Israel afirmó que las FDI reanudaron el combate tras la violación de la pausa operacional por parte de Hamas, quien, según una fuente cercana, recibió la orden de reanudar el combate para defender la Franja de Gaza. El anuncio siguió a la interceptación de un cohete lanzado desde Gaza, el primero desde el inicio del alto el fuego el 24 de noviembre. En respuesta, el portavoz del gobierno israelí, Eylon Levy, argumentó que Hamas decidió poner fin a la pausa al no liberar a todas las mujeres secuestradas, agregando que retener a estas mujeres resultaría en consecuencias graves para el grupo. Según el gobierno israelí, al final de la tregua, hay 137 rehenes en Gaza, incluyendo hombres, mujeres y niños. El Ministerio de Relaciones Exteriores de Qatar expresó su compromiso de continuar sus esfuerzos para volver al acuerdo de tregua, emitiendo un comunicado en ese sentido.
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