Tras largas negociaciones, el Gobierno nacional cerró la compra del nuevo Tango 01, por lo que ahora el Estado deberá depositar más de 22 millones de dólares para poder suplantar al antiguo avión presidencial que se encuentra en desuso desde 2017. La renovación de la flota aérea es un tema de larga data, puesto que desde hace casi cinco años el Ejecutivo nacional no tiene una aeronave propia. Para lograr financiar el nuevo Tango 01, el Gobierno nacional ideó un plan que le permite hacer frente a este gasto. En ese sentido, según explicaron fuentes cercanas al proyecto, la Secretaría General de la Presidencia recibió un incremento presupuestario, aprobado por Alberto Fernández, así como también “el Ministerio de Economía ató la operación a un financiamiento de la CAF (Corporación Andina de Fomento) por 12 millones de dólares a 10 años”. De igual forma, el Gobierno nacional también entregará el viejo Tango 01 como método de pago, nave que fue valuada en 2.962.000 dólares. La transacción se realizará a través de la OACI (Organización de Aviación Civil Internacional), puesto que el dinero “se transfiere a OACI, se firma el contrato y después se hace una inspección pre-compra”. En el caso que la aeronave pase la prueba pre-compra y todo esté en condiciones, el organismo internacional le transfiere los fondos al vendedor. El próximo avión presidencial cuenta con un dormitorio principal y otros dos más pequeños que pueden convertirse en salas, además tiene la tecnología necesaria para que el mandatario mantenga contacto permanente con el exterior.
Compartir
