En el marco de la política de seguridad impulsada por el jefe de Gobierno, Jorge Macri, la Policía de la Ciudad comenzó a utilizar las nuevas pistolas Byrna, diseñadas para desactivar amenazas a una distancia de hasta 20 metros sin recurrir a armas de fuego letales. Estos dispositivos, que funcionan con aire comprimido, ya están en manos de 385 efectivos, con la expectativa de que las 500 unidades estén plenamente operativas en octubre. “Estas armas hacen la diferencia a la hora de proteger tanto a nuestra policía como a los vecinos, además de disuadir y neutralizar a los delincuentes. Ahora, la policía cuenta con una herramienta más antes de que el delincuente saque su arma”, afirmó Macri durante una reunión con vecinos del barrio de Belgrano. Acompañado por el ministro de Seguridad, Waldo Wolff, y el secretario de Seguridad, Diego Kravetz, el jefe de Gobierno destacó la importancia de esta nueva tecnología en la estrategia integral de seguridad de la Ciudad. Las pistolas Byrna, de color naranja, pueden lanzar proyectiles sólidos o químicos que incapacitan momentáneamente a los delincuentes, permitiendo así una intervención eficaz sin el uso de armas letales. Además, se espera que sean particularmente útiles en áreas comerciales y zonas de alta concentración de personas. “Las Byrna forman parte de nuestra prioridad de más equipamiento para la policía, más herramientas para detener delincuentes y mayor seguridad para los vecinos”, aseguró Wolff. Además, las Byrna se suman a las pistolas Taser, que ya han sido introducidas en la fuerza policial y que permiten neutralizar amenazas a corta distancia mediante descargas eléctricas controladas. Con 90 unidades actualmente en uso, la Policía de la Ciudad espera ampliar ese número a 100 para fin de año. La gestión de seguridad de Jorge Macri implementó varias medidas, desde la reducción de piquetes y acampes hasta el despliegue de más de 1.000 nuevos efectivos. Asimismo, el sistema de videovigilancia fue reforzado, cubriendo el 75% del territorio porteño, lo que mejora la capacidad de respuesta ante situaciones de emergencia. Para fin de año, se espera que la Policía de la Ciudad cuente con más de 20.000 agentes en las calles.
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