El Gobierno anunció la apertura de la importación de alimentos como medida para mejorar la competitividad de los precios. La decisión fue comunicada por el vocero presidencial, Manuel Adorni, quien señaló que esta determinación surge de las reuniones entre el ministro de Economía, Luis Caputo, y empresarios del sector. Durante las negociaciones, los empresarios admitieron un aumento de precios por encima de las expectativas inflacionarias. El portavoz destacó que, aunque los empresarios anticiparon un escenario catastrófico, este no se materializó. En este contexto, se tomó la decisión de abrir las importaciones de ciertos productos de la canasta básica, “con el objetivo de generar una mayor competencia de precios en beneficio de las familias y consumidores argentinos”. Adorni añadió que se contemplará una reducción de impuestos para ciertos productos importados. En reuniones previas, el ministro Caputo se reunió con representantes de cadenas de supermercados y empresas de consumo masivo. Se hizo especial énfasis en la discrepancia entre los precios de estos productos y la nueva realidad económica. El ministro reafirmó el compromiso con el programa económico centrado en el equilibrio fiscal y la recuperación del balance del Banco Central. Bajar la inflación se presenta como la prioridad para estabilizar la economía y abrir la puerta a un ciclo de crecimiento que permita la reducción de impuestos, según expresó Caputo a los empresarios. En la misma línea, el presidente Javier Milei destacó en una entrevista televisiva que algunas empresas han subido precios de manera significativa, implementando luego estrategias de descuentos para corregir la percepción del público, generando un impacto en la lista de precios.
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