En una reunión de emergencia, la CGT expresó su desacuerdo con las medidas económicas anunciadas por el Gobierno, considerando que el ajuste de Milei “perjudica al pueblo y no a la elite”. Los dirigentes gremiales consideraron que las acciones de Luis Caputo “acelerarán la inflación”, afectando el poder adquisitivo de los trabajadores. Aunque la CGT busca el diálogo para contribuir a la gobernabilidad, “no se quedará de brazos cruzados”. Los gremialistas también criticaron las medidas al considerarlas como un “disciplinador social” que afecta a provincias, trabajadores y jubilados, poniendo en riesgo miles de empleos. La declaración, titulada “No es la casta, el ajuste lo paga el pueblo”, destaca la “falta de un plan económico ordenado y la necesidad de no cargar los costos de manera desigual en la sociedad argentina”. La CGT reafirmó su posición en “defensa de derechos laborales, libertad sindical, negociación colectiva, poder adquisitivo y eliminación del Impuesto a las Ganancias para los trabajadores”. Aunque no fue parte de los anuncios, el Gobierno buscará modificar los cambios recientes en el piso de Ganancias realizados por Sergio Massa en el Congreso.
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