Diputados se prepara para una última sesión antes de las elecciones presidenciales, con la agenda de campaña de Sergio Massa en primer plano. La sesión, programada para el martes 10 de octubre a las 12, promete ser tensa y llena de cruces, con votaciones ajustadas en perspectiva. El oficialismo tiene la intención de abrir el recinto para discutir varios proyectos, entre ellos uno que establece la devolución del IVA en las compras de productos de la canasta básica para sectores con menores ingresos y la reforma de la Ley de Alquileres, que fue modificada previamente por el kirchnerismo. La sesión también incluirá temas como la creación de universidades, la promoción del desarrollo de la producción de gas natural licuado (GNL), y la incorporación de la figura de la “violencia digital” como una modalidad de violencia en la ley de Protección Integral para prevenir, sancionar y erradicar la violencia contra las Mujeres, entre otros. Sin embargo, la sesión comenzará con el proyecto que crea el Programa Argentina Inclusiva, que se enfoca en la capacitación de empleados públicos y funcionarios para el trato a personas con discapacidad, así como el programa “Compra sin IVA” a partir del 1 de enero de 2024. Este último proyecto, una de las iniciativas destacadas de la campaña presidencial de Sergio Massa, establece el reintegro del 21% en compras de alimentos y productos de higiene de la canasta básica para jubilados, trabajadores registrados que no excedan seis salarios mínimos, personal doméstico y beneficiarios de planes sociales. La sesión se desarrollará en un contexto de alta tensión a días de las elecciones presidenciales, donde se definirá al nuevo presidente o los candidatos que competirán en un posible balotaje. La oposición, en particular Juntos por el Cambio, acusa al Gobierno y a Massa de estar llevando a cabo un “plan platita” que podría resultar en hiperinflación y dejar una bomba para el próximo gobierno. Además, el debate se produce en medio del escándalo que involucra al ex jefe de Gabinete de Buenos Aires, Martín Insaurralde, y el caso Chocolate y el dinero de la Legislatura bonaerense. Por último, la reforma de la Ley de Alquileres, que ocupa un lugar destacado en la agenda, ha generado controversias. La oposición logró darle media sanción en la Cámara Baja a un proyecto que reducía a 2 años los plazos de los contratos de alquiler y permitía actualizaciones más frecuentes. El Senado aprobó la iniciativa la semana pasada, pero con modificaciones. En la próxima sesión, los proyectos en juego serán dos: uno que propone plazos de 2 años y actualizaciones flexibles, y otro que mantiene los contratos de 3 años y establece actualizaciones cada 6 meses, utilizando un índice específico. Además, se aclara que los contratos deben ser en pesos y no en moneda extranjera.
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