El conflicto entre Benjamín Vicuña y Eugenia “la China” Suárez volvió a ocupar la agenda mediática, esta vez por la escolarización de los hijos que comparten en Turquía. Según relató el actor en una entrevista con LAM (América TV), se enteró de que Magnolia y Amancio comenzaron a asistir a clases en Estambul sin recibir aviso previo, lo que, según su versión, alteró la rutina de los niños y complicó la comunicación cotidiana con ellos. “Me gustaría que las cosas volvieran a su lugar, que se hable del trabajo únicamente y que dejemos a los chicos de lado”, expresó Vicuña, quien subrayó la importancia de preservar la intimidad de los menores. El actor reconoció que la modificación de horarios le generó preocupación: “Yo los llamo todos los días a las 7 de la mañana, pero la situación se complicó cada vez más. No soy tonto, me di cuenta”. Ante la falta de información, Vicuña optó por recurrir a la vía legal: “Le pedí a los abogados que se comunicaran y se entendieran. No hubo respuesta en más de una semana”, señaló, en alusión a la dificultad de obtener detalles sobre el colegio. Mientras tanto, Suárez sostuvo públicamente que él estaba al tanto de la decisión, algo que el chileno desmintió. En paralelo al revuelo generado en redes sociales, Vicuña celebró el regreso de los chicos a la Argentina. Desde su cuenta de Instagram compartió una postal íntima junto a Magnolia dentro de una sala de cine, en una salida que definió como “un ritual padre e hija”. Más tarde publicó un video del momento, donde se lo ve disfrutando junto a Magnolia y Amancio de su última película, filmada con Celeste Cid. “Tarde ideal para ir al cine. Papá x dos”, escribió, mientras sus hijos se mostraban entusiasmados frente a la pantalla. De esta manera, el actor buscó destacar el valor del reencuentro familiar y reafirmar que la paternidad sigue siendo “el lugar más sensible” de su vida.
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