La economía experimenta los primeros indicios de un ajuste, evidenciados por un marcado descenso en las ventas minoristas y en pequeñas y medianas empresas (PyMEs) durante el pasado mes de diciembre, con una caída del 11.2%. En términos anuales, estas cifras se tradujeron en un desplome del 13.7% en la medición a precios constantes, culminando el año con una retracción del 3.4%. Contrariamente a lo esperado, las festividades no lograron revertir la tendencia negativa en el consumo. Según informes de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME), un brusco cambio en los precios de bienes y servicios limitó el poder adquisitivo de la población, agravado por la ausencia de variedad en las ofertas. El análisis de la entidad revela que, según los comercios consultados, diciembre estuvo marcado únicamente por un dinamismo puntual generado por la temporada navideña. Muchas compras estratégicamente se adelantaron a noviembre para evitar las futuras alzas de precios previstas para el último mes. En resumen, los siete sectores evaluados cerraron diciembre a la baja, liderados por Alimentos y Bebidas, con una caída del 19,8% en las ventas a precios constantes. En el acumulado anual, Alimentos y Bebidas fue el sector con peor desempeño, retrocediendo un 5.7% en comparación con 2022, mientras que Calzado y Marroquinería demostró ser el más dinámico, registrando un incremento del 0.4%.
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