Los ciudadanos de la provincia de Mendoza acudieron a las urnas para participar en un proceso electoral que tuvo importantes repercusiones a nivel nacional. Estas elecciones provinciales, las últimas antes de las elecciones generales del 22 de octubre, se convirtieron en un termómetro político crucial que marca una tendencia en el panorama político argentino. El exgobernador Alfredo Cornejo de Juntos por el Cambio, logró retener la provincia y lograr su tercera victoria electoral consecutiva. Tras su triunfo en las PASO, donde obtuvo el 43% de los votos, Cornejo se posicionó como favorito para esta contienda electoral y la posibilidad de que Mendoza se tiñera de amarillo, convirtiéndose en la séptima provincia bajo el control de Juntos por el Cambio. En las primarias, Cornejo ganó la interna frente a Luis Petri, el candidato a vicepresidente de Patricia Bullrich. Ambos líderes estuvieron presentes en la provincia para, en un primer momento, esperar los resultados y, promediando la noche, celebrar un septiembre electoral positivo. Sin embargo, el titular del PRO mendocino, Omar De Marchi, no se dio por vencido y luchó incansablemente para arrebatarle la provincia al radicalismo. De Marchi rompió filas con Juntos por el Cambio y lideró un frente que incluía a los libertarios de Javier Milei. En las PASO, logró posicionarse en segundo lugar con el 20,29% de los votos bajo la bandera de la Unión Mendocina, lo que le dio impulso y esperanza para la elección definitiva. Por otro lado, el peronismo también se mantuvo en la contienda y buscó un batacazo histórico. Omar Parisi, candidato por Elegí Mendoza, había salido tercero en las primarias con el 15,68% de los votos, pero aún mantenía la esperanza de dar la sorpresa en las elecciones generales, expectativa que no logró concretarse. Ya con poco más del 41% de las mesas escrutadas, se dieron a conocer los primeros resultados que marcaron una tendencia irreversible que se convalidó con el resultado final que llevó a Alfredo Cornejo a imponerse por una amplia ventaja sobre Omar De Marchi, consolidando su liderazgo en la provincia y abriendo un nuevo capítulo en la historia política de Mendoza. Este triunfo no sólo representa una victoria para Juntos por el Cambio en la provincia, sino que también puede tener un impacto significativo en el escenario político nacional, marcando el camino hacia las elecciones generales de octubre.
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